Este sábado me levanté temprano y con muchas ganas de probar una receta de pan de soda casero muy sencillo pero con toda razón delicioso. Se trata de un pan exprés que no necesita ni fermentación previa, ni levaduras frescas, ni maratón de amasado. El resultado es sorprendente: un pan con una miga muy esponjosa y suave, y crujiente y fina corteza, ideal para saborearlo así solo, o con mantequilla o queso. ¿Quieres sorprender el Día de los Enamorados con un pan hecho con tus propias manos? Pues esta es tu oportunidad de lucirte y quedar como reina o rey de corazones.
Los ingredientes son sencillos y si lees al final podrás quedarte con algunas ideas más, para a partir de esta receta, crear otros panes con toques diferentes, una forma de explotar al máximo lo bueno que tiene este pan rápido y que no se resiste a nadie por poco ducho que sea en las cuestiones de la cocina. Casi se me olvidaba citar la fuente de la receta, y es que no puedo dejar de hacerlo, es el libro de «Pan Casero», de Iván Yarza, que me ha despojado de miedos y falsos mitos acerca de la elaboración de pan. Os lo recomiendo a quienes sientan curiosidad por este mundo tan rico y lleno de historia y aromas.
Ingredientes para preparar Pan de soda con semillas
- 245 gr de harina integral de trigo
- 15 gr harina panificable (harina panificable es toda aquella que tiene más de 10 g de proteínas no tiene que ser de fuerza)
- 3 cucharaditas levadura química (polvos Royal)
- 1/2 cucharada sopera de semillas de amapola
- 1/2 cucharada de lino crudo
- 1/2 cucharada de sésamo crudo
- 1 cucharada de pipas peladas (semillas de girasol crudas o tostadas)
- 1 1/2 cucharada de miel
- 7 gr de sal
- 280-300 gr de agua (unos 200 ml aproximadamente)
Cómo hacer Pan de soda con semillas
- Calienta el horno a 220 grados Celsio arriba y abajo en lo que preparas un molde rectangular. Si no es anti-adherente engrasa con mantequilla y enharina ligeramente. Puedes forrarlo igualmente con papel vegetal para hornear.
- Mezcla en un bol las harinas, la levadura química, la sal, las semillas, la miel y el agua por último. Mezcla todo con una mano hasta que todo esté bien integrado. Tiene que verse como una pasta pegajosa bastante húmeda así que si no salen tus dedos bien untados es que necesita más agua.
- Vierte la mezcla en el molde, espolvorea encima con harina y coloca en el horno durante 40 minutos. Si observas que ya se ha dorado bastante por encima ponle papel de aluminio para cubrirla hasta que se cumpla el tiempo de cocción.
- Saca del horno, desmolda y deja que se enfríe para que se asiente y disfrutes de todo el sabor de este pan.
En otra oportunidad emplea una harina blanca y en vez de utilizar semillas añade unas pasas o pepitas de chocolate, es un pan que acepta todo lo que se te ocurra ponerle, en equilibrio, para enriquecerlo.
Puedes hacer esta misma receta de pan sin el molde haciendo una bola redonda tipo hogaza, para lo cual deberás utilizar menor cantidad de agua en la mezcla y procediendo a hacer dos cortes en cruz bien profundos encima antes de introducirlo en el horno.
¿Recuerdas las tostas de tomate y queso de cabra con brotes tiernos? Pues si haces este pan no dejes de utilizarlo para prepararlas otra vez.
Se ve fantástico
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Gracias!! Además estaba muy sabroso!
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Esto lo pruebo pronto y es que ahora mismo tengo todos los ingredientes.
Gracias, preciosa Magelita.
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Tienes que probar este pan Ernán está francamente bueno…
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Se ve muy rico ese pan…y distinto!
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Está de vicio Maggi, gracias por pasarte.
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