Hoy vuelvo a traer una de las propuestas que he encontrado entre los blogs que sigo y que me ha parecido irresistible. Tengo que confesar que la cocina del no tan lejano Oriente siempre me ha atraído muchísimo. Representa un universo, ahora ya no tan misterioso pero aún fascinante, donde las especias enriquecen el más sencillo de los platos e invitan al despertar de nuestros sentidos. A medida que vas dando vida a un plato, como este Kofta Curry, esos sentidos se van agudizando. Todo un festín para el olfato, la vista y finalmente para el paladar.
La receta que he seguido al pie de la letra excepto por algún detalle, la podéis encontrar en la siguiente dirección: http://gastronoming.wordpress.com/2013/06/03/kofta-curry-albondigas-al-curry/. Y quiero compartirla en este blog porque ha sido un éxito rotundo en casa. La receta que encontraréis pinchando en el enlace anterior está concebida para 8 personas, pero yo la adapté para 4 personas. Al final nos comimos todas las albóndigas entre 3. Señal de que quedaron para chuparse los dedos.
Yo utilicé carne de ternera, unos 600 gramos, pero puedes emplear la que prefieras. De hecho, Kofta significa bola elaborada de carne picada, y de acuerdo con el lugar, se preparan indiferentemente con carne de vaca, cordero, cerdo o pollo. En la India se hacen de verduras o de pescado. Sea de lo que sea, se pueden freír, asar, cocinar al vapor o al grill, siempre con una salsa ricamente especiada como la de esta receta.
La cebolla que empleé en las albóndigas la poché junto con el ajo. Ya tengo comprobado que así las bolas quedan mejor y el sabor es más suave y sabroso. Piqué la cebolla lo más finamente posible en brunoise y no la tuve que pasar por la trituradora. Pero aconsejo que sí se pase por la batidora si no tienes un buen cuchillo y mucha habilidad para picarla muy bien. Al huevo separé la clara y la reservé para otra receta. Solo utilizo la yema porque mi abuela me demostró que así es mejor para luego trabajar mejor la masa. Antes de freír les espolvoreé un poco de harina de trigo para evitar que se pegaran entre ellas o en el fondo de la sartén.
El Garam Masala lo pasé por alto. Me hubiera encantado incluirlo pero como dicen en mi tierra «no lo encontré ni en los centros espirituales». Las medidas del resto de los ingredientes los reduje a la mitad, teniendo en cuenta que de carne empleé la mitad de la que nos propone la receta. La salsa con yogur es una auténtica gozada, muy especiada, pero en justa medida ningún ingrediente sobresale más que otro, todos hacen inigualables estas deliciosas Albóndigas al curry. Y nada más me queda que invitaros a llevar esta propuesta atrevida a sus mesas como yo. Gracias Gastronoming por desvelarme este plato.
Si quieres ver otras de mis recetas con carne picada pincha los siguientes enlaces: Filetes rusos: la hamburguesa que le encanta a los niños y Hamburguesas caseras de carne